“Profesor emérito de esta Universidad, ha dedicado su vida al estudio, preservación, rescate y difusión de la Historia, e inculcado los valores patrios y de identidad nacional a todo un pueblo. Ha realizado una extraordinaria labor historiográfica dándole continuidad al legado de su maestro Emilio Roig”, señaló el Dr. Gustavo Cobreiro Suárez, Rector de la Universidad de La Habana (UH), en la ceremonia de otorgamiento al Dr. Eusebio Leal Spengler del título de Doctor Honoris Causa en Humanidades.
Añadió Cobreiro Suárez que Leal “es guía y ejecutor de un proyecto de restauración y conservación, que devino paradigma universal, que ha convertido al Centro Histórico de La Habana Vieja en Patrimonio de la Humanidad. Ha interpretado con su quehacer el pensamiento del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, y ha sido promotor incansable de una labor social y humanista que alcanza a los más humildes”.
Por su parte, el historiador y escritor Dr. Eduardo Torres Cuevas, presidente de la Academia de Historia de Cuba, indicó que confesaba que en pocas ocasiones se había sentido en una situación tan difícil y tan hermosa como la de este martes. “Hablar sobre Eusebio Leal no es tarea fácil, más si la admiración a su persona se antepone a cualquier línea que piense escribir”, subrayó.
Torres Cuevas expresó que la producción historiográfica del intelectual resulta obligada para el análisis inteligente y profundo de los más variados componentes de la nación, historia, ciencia, cultura y cubanidad.
Muy emocionado, el Historiador de Ciudad de La Habana, Dr. Leal Spengler, manifestó que esta distinción es muy especial, porque vino de “la casa del saber, donde recibimos en días tempranos, la clave interpretativa de las cosas”.
Asimismo, agradeció a los amigos que asistieron al acto a pesar de la lluvia, a los académicos y a las personalidades presentes, que lo acompañaron durante la ceremonia en el Aula Magna.
Recordó a su madre, a su predecesor, el Dr. Emilio Roig de Leuchsenring (1889-1964) y a sus antepasados que lucharon por la independencia de Cuba, y gratificó a los profesores que formaron su carácter y la voluntad que le hizo llegar hasta aquí, y a su amplia red de colaboradores.
Rememoró en su intervención que cuando llegó a la Universidad expresó que buscaba en esas aulas la vida eterna, “que es lo mismo que el conocimiento, porque solo así podremos interpretar el pasado y el futuro”.
Más adelante afirmó que “los protagonistas del cambio somos nosotros, no podemos seguir pensando que toda época pasada fue mejor. Hay que levantar la frente y seguir adelante”.
Con anterioridad, el artífice de la obra rehabilitadora que se desarrolla en el entorno colonial habanero ha recibido el título de Dr. Honoris Causa de 18 universidades nacionales y extranjeras, y posee una extensa lista de condecoraciones y órdenes.
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